Advirtió en ese sentido que aunque La Moneda aceptó poner sobre el tapete todos los temas de interés de la ciudadanía en materia educacional, estos se discuten desde la postura del gobierno.
"El que decide finalmente si hay un acuerdo o no es el gobierno. Entonces hay una situación de poder muy distinta a la hora de enfrentarse a una mesa. Hay cierto grado de vulnerabilidad en esta instancia que genera un riesgo y un escepticismo respecto a los resultados", subrayó Jackson.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica ratificó lo expresado por la también vocera de Confech Camila Vallejo de que serán las bases las que decidan si se acepta o no la propuesta del Ejecutivo de establecer una mesa de trabajo a partir del próximo lunes.
"Hay que analizar todas las variables para ver cuáles son los costos de subirse y de no subirse", expresó en entrevista a ADN Radio Chile.
Tanto Confech como los dirigentes de los estudiantes secundarios anunciaron que seguirán movilizados hasta tanto se dé respuesta a sus demandas a favor de la gratuidad en la educación y en contra del lucro en los colegios.
A juicio de la estudiane Laura Palma, de la Universidad de La Serena, "no están claramente estipuladas las garantías frente al diálogo, porque el ministro dice que esta mesa orientará las políticas públicas del gobierno, pero no nos asegura nada, porque todo se decide en el Congreso".
La Confech responderá el próximo jueves al Ejecutivo si acoge o no su iniciativa.
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